La bahía exterior de Cartagena de Indias comprende las islas de Tierrabomba, Barú y Manzanillo, donde la Corona Española construyó varias de las fortificaciones más poderosas de la Colonia, entre las que se cuentan el Castillo de San Luis, destruido por el inglés Edward Vernon en 1741; el Fuerte San Fernando, el Fuerte San José, el Fuerte-Batería del Ángel San Rafael, la Batería de Santa Bárbara, así como las baterías de Santiago, Chamba y San Felipe. Con este conjunto de fortificaciones se buscaba blindar a la Bahía de Cartagena e impedir cualquier acceso no autorizado de embarcaciones a la ciudad.
En la bahía exterior también se habilitaron varios hornos de cal y canteras que sirvieron para el suministro de los materiales necesarios para sacar avante el proyecto de fortificación de la ciudad.